Gracias a los Locos de la Azotea
«…Y anoche una onda sonora onduló vermicular, de las 21 a las 24, por el espacio, como cubriendo con su sutil celaje de armonías -las más caprichosas, ricas, grávidas de nobles emociones-, la ciudad...
«…Y anoche una onda sonora onduló vermicular, de las 21 a las 24, por el espacio, como cubriendo con su sutil celaje de armonías -las más caprichosas, ricas, grávidas de nobles emociones-, la ciudad...